Capítulo 6:Entrega 55-Mis compañeros XIX

Catalina y Josefa.dos mujeres de edad madura.Pues bien con ellas,ni una palabra.No me inspiraban nada,y no por desconfianza.Simplemente porque o bien las veía demasiado inaccesibles para mi gusto y cualquier intento resultaba inútil o bien porque yo ya estaba a mis anchas y no me quedaban ganas de buscar nada más.
Con Josefa,hubo un pequeño resquicio de vínculo por el dichoso tabaco.Le di cigarrillos en un par de ocasiones y punto.En ambas ocasiones se refería a mí con un "usted".

De Berta,conocí su existencia casi al final de mi trayecto psiquiátrico,puesto que el viernes-el día en que yo ingresé-le habían dado permiso de fin de semana.Así que tampoco llegúe a conocerla.Sólo la vi una vez,de pasada,en la S.T,dibujando...hacia puntitos e iba formando una especie de siluetas o algo así.
Recuerdo que yo aún novato,recien llegado,alguien me dijo
-Oye que Berta se va por el fin de semana
-¿Y quien es Berta?-pregunté extrañado
-Joder,¿no sabes quien es Berta?.Esa chica que blablabla.....
No recuerdo el sermón que me soltaron a propósito de Berta.El caso es que para mi era como si me estuvieran hablando de una persona como si yo la tuviera que conocer a la fuerza,por cojones,vaya.Oye,que yo sólo llevaba unas horas y el viernes era mi primer día....¿ya tenía que conocer a todo el mundo o qué?.Si estuviera uno o dos meses como era mi pretensión,seguro que podría hablar con más conocimiento de causa,pero yo voy a mi rimo a la hora de conocer gente.Y en cinco días creo que hice bastante en este sentido,aunque evidentemente no pude abarcar todo lo que quisiera.Además mi timidez por naturaleza tampoco ayuda mucho,aunque una vez dentro me dí cuenta de que cuanto antes conociera gente,mejor que mejor.Bertiña,cielo,que más quisiera yo que tener tiempo para todos y todas,de verdad.

De Conchi,que fue una de las últimas en ingresar antes de mi partida,quizás si pueda hablar algo más.Se le veía más extrovertida de lo que allí era habitual,incluso más risueña tambien e incluso con más ganas de comunicarse con los demás.No venía a aislarse,al contrario.Fue 
un placer aceptarla como nueva compañera de juegos en el sempiterno dominó junto a Arturo y un servidor.Incluso nos ganó una partida.
Por fin una mujer riéndose a gusto,junto con Sonia claro.Eso me hizo sentir muy bien y a ella creo que aún más aunque sólo fuera por algo tan trivial como una partida ganada.De cualquier modo esa era una buena forma de comenzar con buen pie.Lamento haberme olvidado de despedirme de ella,cuando sin embargo ella no se olvidó de mi con el "regalo" de despedida.Te debo una,Concho,no lo olvides.

CONTINUARÁ

Jeff W.