lunes, 11 de febrero de 2008

Capítulo 2:Entrega 8

Debían ser sobre las 14:00 horas cuando salimos de la consulta  y nos dispusimos a volver a casa para prepararlo todo no sin antes para a comer por el camino.En vez de coger la autopista de vuelta salimos de Santiago de Compostela por la carretera general.Íbamos a parar en Ordes,en una jamonería donde se comen unos embutidos buenísimos además de ser barata de precio.Antes de continuar con la "movida gastronómica", quisiera decir que salí de la consulta muy aliviado.Como si me quitara un peso de encima.Sentí que algo nuevo dentro de mí que me cambiaría,que me "limpiaría" a fondo todo el embrollo mental y psicológico que llevaba encima durante demasiado tiempo.Por fin empezaba a ver la luz,a contemplarme a mi mismo desde otra óptica más clara y transparente,y matando por fin los fantasmas del pasado.

Serían las 14:30 horas cuando llegamos a nuestro destino.El estómago ya gritaba de impaciencia.Llegamos con calma.Mi padre no es de los que le pisan al acelerador tenga o no tenga prisa.Conseguimos aparcar enseguida,cosa rara no ya en las grandes urbes sino tambien en las ciudades digámoslo así "pequeñas".Me parece que Ordes debe ser más o menos en cuanto a habitantes como Sada o Betanzos,pueblos o ciudades muy próximos a Bergondo,mi lugar natal.

Mientras mi padre entraba en la jamonería-siento no recordar el nombre del local pero es verdaderamente aconsejable dejarse caer por allí-,yo fui a recargar mi móvil puesto que pensé,ingenuamente,que lo necesitaría "allí dentro".Así que me acerqué a un bar donde tenían una máquina "recargadora".Nunca había visto un trasto de estos.Sólo había que introducir el número,meter el correspondiente billete acorde con la recarga y al poco la recarga hecha.Todo,como digo pensando en que podría estar en un psiquiátrico con el móvil.A saber donde tendría la cabeza en ese momento para pensar algo así.

A lo que iba,salí del bar y me dirigí apresuradamente a la jamonería en donde mi padre ya había cogido mesa.Encargamos una bandeja de embutidos surtidos,de beber vino para mi padre y cerveza para mí.Momento histórico este,estaba paladeando y saboreando mis últimas birras que tanto placer me habían dado en el pasado pero que me habían colocado en un extremo demasiado peligroso.

La primera bandeja poco duró.Más que comer yo devoraba,mientras mi padre imperturbable como casi siempre iba a lo suyo como quien no quiere la cosa.La cerveza duró lo que duró.Y así hasta una segunda bandeja de embutidos.Puestos a irse para el hospital,mejor con el buche a tope.Y con una segunda cerveza que fue la última.Cuando digo última ,me refiero a que es la  última vez que he tenido,tengo y tendré contacto con el alcohol.

Se remató la faena con cafes,postre,etc,etc.Ya eran las 15:00.A partir de ahí,ya era bueno cualquier momento,horariamente hablando,para ir a donde me aguardaba mi breve destino de cinco días:el psiquiátrico.

CONTINUARÁ


Jeff W.

0 comentarios: